APUNTES…
CLARA LECCIÓN DEJA AUREOLES CON SU PERVERSIDAD
Guillermo Fabela Quiñones
Cuando surgen crisis de largo alcance, como esta que padecemos por el Covid-19, se presentan oportunidades para los canallas que buscan sacar provecho de una realidad propiciatoria. Así ha sido y seguirá sucediendo, la condición humana da para todo lo bueno y lo malo. Esto es lo que trató de hacer el gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles Conejo, con un video que hizo público con resultados contraproducentes al objetivo buscado: posicionarse ante el conservadurismo como el líder natural de la derecha, a sabiendas de que carece de personajes para dar una batalla frontal al gobierno del presidente López Obrador.
Es de llamar la atención que unos cuantos de los correligionarios del mandatario hayan salido en su defensa, como lo ameritaba el despropósito reaccionario del gobernador michoacano. El único que lo hizo, con la claridad y energía que demandaba esa bellaquería, fue el gobernador de Puebla, Miguel Barbosa. En una carta enviada a Silvano Aureoles que hizo pública, asumió la defensa del líder de la Cuarta Transformación, de quien podrá decirse que tiene errores y desaciertos en la conducción del gobierno, pero jamás se le podrá achacar que sea traidor a la patria y al pueblo, corrupto e hipócrita.
DESCUBRE LAS INTENCIONES PERVERSAS DE AUREOLES
En cinco puntos, Barbosa descubre las intenciones perversas de Aureoles. Comienza afirmando: “No mienta ni tergiverse la información, no es digno de un gobernador intentar difamar al presidente de la República con rumores mal intencionados”. Esto en respuesta a los dichos de que el mandatario mexicano va a la Casa Blanca porque se lo ordenó Donald Trump y con su visita pondría en riesgo el futuro de la nación. Es obvia la coincidencia con la argumentación en ese sentido sostenida por los voceros de la derecha.
Luego Barbosa puntualiza: “Lo que usted pretende con sus provocaciones es boicotear una reunión de suma importancia… lo que le incomoda es que la firma del T-MEC sea un gran éxito para el gobierno de México, en favor de todas y todos los mexicanos, que por supuesto incluye a los michoacanos y poblanos”. En efecto, no es otro el objetivo de Aureoles al adelantarse a los principales personeros de la reacción, quienes anhelan un fracaso rotundo de la 4T para enarbolarse como los salvadores del colapso.
En seguida, el mandatario poblano señala: “Usted critica la visita… para sacar raja política… No lo hizo cuando Trump era candidato y mucho menos en el tiempo en que Enrique Peña Nieto fue presidente de México, dado los acuerdos que tuvo con ese gobierno priísta, que hicieron posible su llegada a la gubernatura. Más bien piensa usted que con esta falta de respeto se puede instalar (como) líder de la oposición al régimen actual”. Ese es claramente el objetivo del michoacano, quien supone que así podrá abrirse paso en la cúpula del conservadurismo a fin de lograr su apoyo en los comicios de 2021.
GOBERNANTE SOBERBIO QUE TEME EL JUICIO DE LA HISTORIA
Barbosa lo conmina con firmeza: “No gobernador, no hable a nombre de todos los mexicanos, no sea soberbio. Es más, no hable a nombre de su gobierno, porque la inmensa mayoría de la población de Michoacán apoya al presidente López Obrador, no a usted”. Inobjetable cuestionamiento avalado por la realidad, el cual en este momento es más contundente por el fracaso rotundo de un gobernante sin más objetivo que ser cómplice de los intereses más nocivos para la entidad, como es del dominio público.
Finaliza su carta con este párrafo: “El presidente Andrés Manuel López Obrador es un hombre honesto, leal a sus principios y al pueblo de México y en cada uno de sus actos representa dignamente a nuestro país. Usted es quien traicionó a la izquierda, la traicionó al aliarse con los conservadores en las elecciones de hace dos años… La única sumisión fue la suya ante el gobierno de Enrique Peña Nieto”.
Es válido hacer notar un hecho preocupante: el presidente López Obrador carece de una organización que asuma su defensa en situaciones en que resulta fundamental hacerlo. Esto se vio claramente en la falta de respuesta que merecía la insensatez de Aureoles, no al ciudadano López Obrador, sino a la institución que representa. Es hora de que se cubra este vacío del cual se puede aprovechar el conservadurismo con fines de venganza social y de recuperar sus privilegios perdidos.
Miguel Barbosa, defensor de la Institución Presidencial
Es urgente rescatar al partido (Morena) con una dirigencia progresista, depurar sus filas de oportunistas, corruptos y agentes de la derecha. El futuro de la 4T depende de que triunfe en los comicios del próximo año, de manera transparente. El pueblo ya sabe identificar quién es un impostor, un vividor y un rufián. No votaría por él aunque representara a Morena. Así de clara es ahora la realidad.
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