Libertad Diario
Al gobierno estadounidense NO le gusta la izquierda en México
Eduardo Solórzano

Hasta este momento, el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador, no se ha pronunciado en felicitaciones e inclusive, no ha dado su aprobación reconociendo al expresidente Joe Biden como ganador de las elecciones presidenciales en los Estados Unidos, en lo que pareciera un estricto pragmatismo diplomático esperando los resultados oficiales, pero también supone que no le ha gustado mucho que los demócratas y el viejo régimen volverán a la Casa Blanca más allá de no celebrar la democracia de “América”.
Trump el paradigmático.
Para el pueblo norteamericano Donal Trump resulto un paradigma ya que sin carrera y/o experiencia política, sin conocimientos sobre la verdadera función del gobierno de los Estados Unidos en su contexto interno y global, sin entendimiento de la correlación geopolítica de su país con el mundo y sólo con su fanfarronería de celebridad millonaria, caucásica neoyorquina; conquistó a las masas principalmente blancas con su discurso “Make América Great Again”, como si los Estados Unidos fueran un país repleto de pobres, sin tecnología, controlado por otro estado, miserable y tercermundista como la mayoría de las naciones en el mundo. Lo cual demuestra que muchos de los ciudadanos de ese país son totalmente susceptibles a las manipulaciones de sus celebridades mediáticas.
Quizás Donald Trump pase a la historia como uno de los presidente más torpes y peores calificados de los Estados Unidos, pero lo cierto es que, sin su presencia en la Casa Blanca, Andrés Manuel López Obrador muy probablemente no hubiera llegado a la presidencia de México.
La profunda derecha católica estadounidense

Si usted ha visto películas Hollywoodenses donde alguien tiene que tomar juramento por alguna razón o circunstancia dentro de un tribunal por ejemplo para rendir declaración, los involucrados ponen su mano izquierda sobre un libro jurando decir la verdad y nada más que la verdad, mientras levantan la mano derecha asumiendo sus palabras, pero ese libro no es la constitución de los Estados Unidos, ese libro es la Biblia, ese libro sagrado de los católicos con la que los fundadores de ese país tomaron como principio sagrado para consumar su fortaleza nacional. Y hoy en día en cada toma y/o protesta para ocupar un cargo publico incluida la presidencia, lo hacen con ese principio aunque muy probablemente esas personas como Barack Obama o Kamala Harris pudieran haber sido criados bajo otra religión, el catolicismo y específicamente el protestantismo son la base de todo principio jurídico de Los Estado Unidos y como todos sabemos, si hay algo que tenga un contexto de derecha o ultra derecha es la religión católica que prácticamente domino durante 10 siglos toda Europa y son quienes inventaron los servicios de inteligencia y espionaje globales. Desde esta perspectiva podemos darnos cuenta que los estadounidenses son por mayoría católicos protestantes en donde ningún pensamiento de izquierda como el ateísmo, el socialismo o comunismo cabe en su sociedad. Por esta razón sus partidos políticos son todos de derecha con una doctrina muy parecida entre sí, donde es imperativo luchar contra las “abominables” ideas de izquierda o gobiernos que no les son afines.
La lucha estadounidense contra el comunismo, socialismo o lo que les parezca rojillo
Durante muchos años, los presidentes como George H. W. Bush, Bill Clinton, George Bush y Barack Obama, lucharon contra las terribles garras del comunismo que pudieran azotar su territorio, inclusive prohibiéndolo dentro de América Latina aunque por ahí se las haya colado Bolivia o Venezuela y la siempre Cuba, la lucha había sido imperativa porque esa es su “chamba”, ya que representan a un país “libre”, soberano y principalmente “democrático”, por eso instauran en los países que invaden y derrocan a sus gobernantes, la “maravillosa democracia” que pregonan por doquier, y México no ha sido la excepción, inclusive durante la matanza del 68 en Tlatelolco, el presidente Diaz Ordaz declaro que gracias a estas acciones, “Estaba orgulloso de haber salvado al país”, ¿De qué lo salvo? Claramente nos libró del “comunismo”, principal enemigo de los gringos y sus aliados, claro, todo amañado con la Agencia Central de Inteligencia mejor conocida como la CIA.
Presidentes amigos, presidentes aliados

El proyecto neoliberal que llegó a México con los famosos “tecnócratas” como Carlos Salinas de Gortari que estudio una maestría en Harvard, y que se venía calentando durante el sexenio de Miguel de la Madrid, dio a nuestro país una relación más estrecha con el vecino país del norte representado con el otrora TLC (Tratado de Libre Comercio), y que nos “permitió trabajar” en conjunto con ellos, pero claramente también se tenían que seguir sus lineamientos y obviamente las condiciones nunca han sido parejas, pero los más fortalecidos han sido los lazos de la derecha mexicana como el PRI y después PAN, que se han sometido a los caprichos de las políticas estadounidenses generadas desde Washington y eso incluía evitar a toda costa la llegada al poder de la izquierda a cambio de algunas “concesiones”.
Se relajo el combate contra la izquierda con Donald Trump
Donald Trump rompió el esquema trazado por sus antecesores con un discurso y políticas que rompían el protocolo contra México y el mundo, llamo a Enrique Peña en modo burlón “presidente capitalista”, se refirió a los mexicanos como violadores, ladrones y calificó a nuestros políticos como “corruptos”, esa es su impresión de nosotros, en algunos casos reales en otras simples patrañas, pero lo cierto es que ningún presidente de los Estados Unidos había sido tan duro con los mexicanos en su discurso porque en la acción los demócratas como Bill Clinton y Barack Obama has sido enemigos reales de México y América Latina.
Operación Guardian de Bill Clinton

Para muchos mexicanos que viven en la frontera norte, el muro forma parte del paisaje cotidiano desde hace más de dos décadas. En concreto, desde principios de los años 90s, cuando el presidente demócrata Bill Clinton ordenó la construcción del primer tramo como parte de la "Operación Guardián". Este programa establecía levantar 600 kilómetros de muro y 800 de barreras.
A diferencia de Trump, el discurso de Clinton "no era agresivo contra México", pero buscaba desviar a los migrantes al desierto "sin escándalo político" y "retórica agresiva", para así desalentarlos a cruzar lo cuál arrojo nuevas rutas por el desierto donde miles de personas han fallecido debido a las condiciones climáticas y a manos de los guardias fronterizos. Digamos que esa idea del muro de Trump, no era tan nueva, creativa o sorprendente.
Los números no mienten sobre las deportaciones

Los grandes presidentes deportadores de mexicanos y/o extranjeros desde los Estados Unidos, son los que nos han dado una sonrisa amable y no han criticado a nuestros políticos corruptos. Los números de Trump durante su estadía al frente de la Casa Blanca, son inferiores en proporción a los de Barack Obama.
Políticos mexicanos de primer nivel en cárceles de USA

Durante décadas los políticos mexicanos se han enriquecido sin medida al ocupar cargos públicos y el paraíso para descansar de los saqueos siempre habían sido los Estados Unidos, porque es el primer mundo, porque esta bonito, porque está cerca, porque es seguro y porque nadie los molestaría, pero como reza ese dicho que “en política nada es casualidad”, durante las presidencias de Donald Trump y López Obrador, se han encarcelado y enjuiciado a Salvador Cienfuegos, íntimo del ex presidente Enrique Peña, y a Genaro García Luna, preferido del expresidente Felipe Calderón. Lo cual muy probablemente no hubiera sucedido si hubiera ganado Hillary Clinton allá y acá Ricardo Anaya o José Antonio Meade. Hoy gracias a Trump, Estados Unidos no es un destino preferido por políticos mexicanos, y por estas razones muy probablemente Enrique Peña se refugie en España y Felipe Calderón no visite Las Vegas o Disneylandia, para no jugarle al macho.
“Los mejores servicios de inteligencia del mundo”

Así como las autoridades mexicanas no se daban cuenta del enriquecimiento ilícito de muchos políticos y funcionarios mexicanos y solo perseguían y capturaban a peces medianos o chicos con fines electorales, en Estados Unidos que presumen de tener los mejores servicios de inteligencia del planeta, irónicamente tampoco se habían dado cuenta que en su territorio viven y han vivido por décadas, políticos mexicanos con sus familias a todo lujo con dinero sospechoso y vidas completamente opulentas, ¿nunca se percataron las administraciones de Obama, Bush padre, Bush hijo o Bill Clinton de estos personajes? Y ¿Por qué hasta el mandato de Donald Trump, extrañamente sí se han capturado a dos poderosos personajes mexicanos, relacionados con los más altos niveles políticos y el narcotráfico? Todo indica que hubo algunas concesiones anteriormente.
Probable campaña contra Andrés Manuel y la 4T desde Washington
La llegada de Joe Biden a la presidencia, volverá a tener un plan de control financiero y políticos globales, se reinstalarán y fortalecerán las políticas neoliberales y se reincorporarán las alianzas estratégicas con los gobiernos aliados, pero esas alianzas en México hoy no existen, porque los antecesores a Trump pactaron con regímenes neoliberales de derecha a los que en nuestro país llamamos PRIAN.

Jamás un presidente de Estados Unidos, había tratado con uno mexicano de izquierda, hasta que Amlo estuvo en la Casa Blanca con Trump, y ahora le tocará a Biden, pero lo más probable es que desde la oficina oval, la CIA, DEA y todas las oficinas de control fuera de territorio estadounidense, se lleve a cabo una campaña para reinstaurar a la derecha en México y América Latina, por las simples razones que explique al principio de este texto… “Los gringos luchan por naturaleza contra su principal enemigo sobre la faz de la tierra, la izquierda socialista del mundo”.

Las ideas argumentos y análisis expuestos, son responsabilidad de sus autores y no necesariamente coinciden con el criterio de ciencialibertad.org